No
puedo encerrarte en mi cárcel
no
merezco vivir en tu libertad.
Es ya
en vano lucharte
pájaro
de mil horizontes.
Volverán
tus alas a rasgar el aire
dejando
atrás el nido de mis besos.
Quizás
alguna perdida estación
te
devuelva a la jaula de mis caricias.
Tal
vez un suave viento 
que alguna
vez fue suspiro
devuelva
a mi lado
aquel
pajarito que preferí  volando
antes
que cien en mi mano.
ptp
